Abadía de Melk
Historia
La monumental abadía benedictina de Melk, visible desde lejos, brilla de color amarillo brillante en un acantilado empinado que se inclina hacia el norte hacia el río Melk y el Danubio. Como uno de los conjuntos barrocos unificados más hermosos y más grandes de Europa, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
831 el lugar se menciona como Medilica (= río fronterizo) y fue importante como aduana real y distrito del castillo.
En la segunda mitad del siglo X, el emperador enfeudó a Leopoldo I de Babenberg con una estrecha franja a lo largo del Danubio, con el castillo, un asentamiento fortificado, en el centro.
Los manuscritos de la Biblioteca de la Abadía de Melk se refieren a una comunidad de sacerdotes que ya estaban bajo el margrave Leopoldo I. Con la extensión del dominio hacia el este a Tulln, Klosterneuburg y Viena, Melker Burg perdió su importancia. Pero Melk sirvió como lugar de entierro para los Babenberg y como lugar de entierro para St. Koloman, el primer santo patrón del país.
El margrave Leopoldo II hizo construir un monasterio en la roca sobre la ciudad, al que se mudaron los monjes benedictinos de la abadía de Lambach en 1089. Leopoldo III transfirió a los benedictinos la fortaleza del castillo de Babenberg, así como fincas y parroquias y el pueblo de Melk.
Dado que el monasterio fue fundado por un margrave, se retiró de la jurisdicción de la diócesis de Passau en 1122 y se colocó directamente bajo el Papa.
Hasta el siglo XIII Melker Stift experimentó un auge cultural, intelectual y económico y una escuela de monasterio está documentada en manuscritos desde 13.
Un gran incendio la destruyó a finales del siglo XIII. Monasterio, iglesia y todas las dependencias. La disciplina monástica y los cimientos económicos se vieron sacudidos por la peste y las malas cosechas. Las críticas a la secularización de los monjes y los abusos asociados en los monasterios dieron como resultado una reforma decidida en 13 en el Concilio de Constanza. Siguiendo el ejemplo del monasterio italiano de Subiaco, todos los monasterios benedictinos deben basarse en los ideales de la Regla de Benito. El centro de estas renovaciones fue Melk.
Nikolaus Seyringer, abad del monasterio benedictino italiano en Subiaco y ex rector de la Universidad de Viena, fue instalado como abad en el monasterio de Melk para implementar la "reforma de Melk". Bajo su mando, Melk se convirtió en un modelo de estricta disciplina monástica y, en conexión con la Universidad de Viena, en un centro cultural en el siglo XV.
Dos tercios de los manuscritos de Melk que han sobrevivido hasta el día de hoy datan de este período.
Período de reforma
Los nobles entraron en contacto con el luteranismo en las Dietas. También como expresión de su resistencia política a sus soberanos, la mayoría de la nobleza se convirtió al protestantismo. Los granjeros y residentes del mercado tendieron a volverse hacia las ideas del movimiento anabaptista. El número de personas que ingresaban al monasterio se redujo drásticamente. El monasterio estaba al borde de la disolución. En 1566 sólo quedaban en el monasterio tres sacerdotes, tres clérigos y dos hermanos laicos.
Para evitar influencias luteranas, las parroquias de la zona fueron ocupadas desde el monasterio. Melk fue el centro regional de la Contrarreforma. Basado en el modelo de los colegios jesuitas de seis clases, en el siglo XII. fundado,
escuela más antigua de Austria, la Melker Klosterschule, reorganizada. Después de cuatro años en la Escuela Melk, los estudiantes fueron al Colegio Jesuita de Viena durante dos años.
En 1700 Berthold Dietmayr fue elegido abad. El objetivo de Dietmayr era enfatizar la importancia religiosa, política y espiritual del monasterio con un nuevo edificio.
En 1702, poco antes de que Jakob Prandtauer decidiera construir un nuevo monasterio, se colocó la primera piedra de la nueva iglesia. El interior fue diseñado por Antonio Peduzzi, el estuco por Johan Pöckh y el pintor Johann Michael Rottmayr los frescos del techo. Paul Troger pintó los frescos de la biblioteca y del Salón de Mármol. Christian David de Viena fue el responsable del dorado. Joseph Munggenast, sobrino de Prandtauer, completó la dirección de la construcción después de la muerte de Prandtauer.
En 1738, un incendio en el monasterio destruyó el edificio casi terminado.
Finalmente, la nueva iglesia del monasterio fue inaugurada 8 años después. El organista del monasterio de Melk fue el posterior maestro de capilla de la catedral de Viena, Johann Georg Albrechtsberger.
El siglo XVIII fue una época dorada en términos de ciencia y música. Sin embargo, debido a su importancia para el estado, el sistema escolar y el cuidado pastoral, el monasterio no fue cerrado bajo José II como muchos otros monasterios.
En 1785, el emperador José II colocó el monasterio bajo el liderazgo de un comandante abad estatal. Estas disposiciones fueron rescindidas después de la muerte de José II.
En 1848 el monasterio perdió su señorío, y el dinero de compensación económica recibido de este se destinó a la renovación general del monasterio. El abad Karl 1875-1909 tuvo una gran influencia en la vida de la región. Se instaló un jardín de infancia y el monasterio donó un terreno a la ciudad. Además, por iniciativa del abad Karl, se plantaron árboles de sidra a lo largo de los caminos rurales, que aún hoy caracterizan el paisaje.
A principios del siglo XX se instalaron alcantarillas, nuevas tuberías de agua y luz eléctrica. Para financiar el monasterio vendió, entre otras cosas, una Biblia de Gutenberg a la Universidad de Yale en 20.
Después de la anexión de Austria en 1938, la escuela secundaria del monasterio fue cerrada por los nacionalsocialistas y la mayor parte del edificio del monasterio fue confiscada para una escuela secundaria estatal. El monasterio sobrevivió a la guerra y al posterior período de ocupación casi sin daños.
Los trabajos de restauración del edificio de entrada y del patio del prelado, así como el análisis estructural de la biblioteca y la Sala Kolomani, fueron necesarios para celebrar el 900 aniversario del monasterio en 1989 con una exposición.
el bolígrafo
El complejo, construido uniformemente en estilo barroco por Jakob Prandtauer, tiene 2 lados visibles. En el este, la entrada palaciega de costado estrecho con el portal terminado en 1718, que está flanqueado por dos baluartes. El bastión sur es una fortificación de 1650, se construyó un segundo bastión en el lado derecho del portal por simetría.
Hacia el oeste experimentamos una producción teatral desde la fachada de la iglesia hasta el balcón con una vista lejana sobre el valle del Danubio y las casas de la ciudad de Melk al pie del monasterio.
En medio, se suceden patios de diferentes dimensiones, que se orientan hacia la iglesia. Cruzando el edificio de la puerta se entra en el patio del portero, en el que se encuentra una de las dos torres de Babenberg en el lado derecho. Forma parte de una antigua fortificación.
Continuamos a través del arco y ahora estamos en un salón luminoso de dos pisos, el Benediktihalle, con un fresco de St. Benedicto en el techo.
Desde aquí nos asomamos al patio trapezoidal del prelado. En el medio del patio se encontraba la fuente Kolomani hasta 1722, que el abad Berthold Dietmayr regaló a la ciudad comercial de Melk. Una fuente de la disuelta abadía de Waldhausen ahora se encuentra en lugar de la fuente Kolomani en el medio de la corte del prelado.
La simplicidad y la armonía tranquila caracterizan la estructura de la fachada de los edificios circundantes. Las pinturas barrocas en los frontones centrales de Franz Rosenstingl, que representan las cuatro virtudes cardinales (moderación, sabiduría, valentía, justicia), fueron reemplazadas en 1988 por representaciones modernas de pintores contemporáneos.
Kaiserstiege, Kaisertrakt y Museo
Desde Prälatenhof pasamos por la esquina trasera izquierda a través de la puerta sobre una columnata hasta Kaiserstiege, la majestuosa escalera. Apretado en la parte inferior, se despliega hacia arriba con estucos y esculturas.
En el primer piso, el Kaisergang de 196 m de largo recorre casi todo el frente sur de la casa.
En las paredes del Kaisergang en la abadía de Melk se cuelgan retratos de todos los gobernantes austriacos, Babenberger y Habsburgo. Desde aquí entramos en las salas de la familia imperial, que se utilizan como museo del monasterio. El "Melker Kreuz", donado por el duque Rodolfo IV, un valioso escenario para una de las reliquias de más alto rango, una partícula de la cruz de Cristo, solo se exhibe en ocasiones especiales.
custodia colomaní
Otro tesoro del monasterio es la custodia Kolomani, con la mandíbula inferior de S. Koloman, Dar. Anualmente, en el día de la fiesta de San Koloman, el 13 de octubre, se muestra en un servicio en memoria del santo. De lo contrario, la custodia de Kolomani se exhibe en el Museo de la Abadía de la Abadía de Melk, que se encuentra en las antiguas salas imperiales.
Sala de mármol
El Salón de Mármol, de dos pisos de altura, se conecta con el Ala Imperial como salón de banquetes y comedor para invitados seculares. La sala se calentaba con aire caliente a través de una rejilla de hierro forjado empotrada en el suelo en el centro de la sala.
Una pintura de techo monumental de Paul Troger en el techo plano fuertemente acanalado en el Salón de Mármol de la Abadía de Melk es impresionante, con la que ganó fama nacional. "Triunfo de Palas Atenea y victoria sobre los poderes oscuros" representa figuras flotando en una zona celestial sobre una arquitectura simulada pintada.
Biblioteca
Después de la iglesia, la biblioteca es la segunda sala más importante de un monasterio benedictino y, por lo tanto, existe desde la fundación del monasterio de Melk.
La Biblioteca Melk está dividida en dos salas principales. En la segunda sala más pequeña, una escalera de caracol empotrada sirve de acceso a la galería circundante.
El fresco del techo de Paul Troger en la mayor de las dos salas de la biblioteca crea un contraste espiritual con el fresco del techo en el Salón de Mármol de la Abadía de Melk. La madera oscura con incrustaciones y el color marrón dorado uniforme a juego de los lomos de los libros determinan la experiencia espacial impresionante y armoniosa. En la planta superior hay dos salas de lectura con frescos de Johann Bergl, que no son accesibles al público. La biblioteca de Melk Abbey contiene alrededor de 1800 manuscritos desde el siglo IX y un total de alrededor de 9 100.000 volúmenes.
La Colegiata de St. Pedro y San Paul, dedicada en 1746
El punto culminante del complejo del monasterio barroco de la abadía de Melk es la iglesia colegiada, una imponente iglesia abovedada con una fachada de doble torre inspirada en la iglesia jesuita romana Il Gesu.
Entramos en una poderosa sala con bóveda de cañón con capillas laterales y oratorios y una cúpula de tambor de 64 metros de altura. Gran parte de los diseños y sugerencias para el interior de esta iglesia se remontan al arquitecto de teatro italiano Antonio Beduzzi.
En el interior de la Colegiata de Melk, se abre ante nosotros una pomposa obra de arte barroco. Una sinergia de arquitectura, estuco, tallas, estructuras de altares y murales decorados con pan de oro, estuco y mármol. Los frescos de Johann Michael Rottmayr, los retablos de Paul Troger, el púlpito y el altar mayor diseñados por Giuseppe Galli-Bibiena, las esculturas diseñadas por Lorenzo Mattielli y las esculturas de Peter Widerin crean la abrumadora impresión general de esta alta iglesia barroca.
Del gran órgano construido por el constructor de órganos vienés Gottfried Sonnholz, solo se ha conservado la apariencia externa del órgano de la época en que se construyó en 1731/32. El trabajo real fue abandonado en 1929 durante una conversión. El órgano actual fue construido por Gregor-Hradetzky en 1970.
jardines
El parque barroco de la abadía con vista al pabellón del jardín barroco en la planta baja fue diseñado originalmente con adornos florales, vegetales verdes y grava barrocos, a partir de la idea del jardín "paraíso" de la era barroca en el momento en que se creó. El jardín se basa en un concepto filosófico-teológico, el número sagrado 3. El parque se distribuye en 3 terrazas con un estanque de agua, el agua como símbolo de vida, en la 3ª terraza. El cuenco barroco curvo de la fuente en la planta baja, en el centro del eje longitudinal del jardín y el pabellón del jardín, corresponde a la linterna sobre la cúpula de la iglesia, en la que S. El Espíritu, la tercera persona divina, se representa en forma de paloma como símbolo de la vida.
Después de 1800 se diseñó un parque paisajístico inglés. Luego, el parque se cubrió de maleza hasta que el parque del monasterio fue renovado en 1995. Se restauró el "Templo de Honor", un pabellón neobarroco de columnas abiertas de ocho lados con capota abuhardillada en la terraza 3 del parque del monasterio, y una fuente, así como el antiguo sistema de caminos. Una avenida de tilos, algunos de los cuales tienen alrededor de 250 años, está plantada en el punto más alto del parque de la abadía. Acentos de arte contemporáneo conectan el parque con el presente.
La instalación del "Benedictus-Weg" tiene como contenido el tema "Benedictus el bendito". El jardín del paraíso se diseñó según los modelos antiguos de los jardines del monasterio, con hierbas medicinales y plantas aromáticas y de colores fuertes.
A continuación se muestra un "Jardin méditerranée", un exótico jardín mediterráneo. A lo largo del camino se plantan plantas bíblicas como higueras, vides, una palmera y un manzano.
mirador
El pabellón de jardín barroco en la planta baja del parque de la abadía llama la atención.
En 1747/48, Franz Munggenast construyó el pabellón del jardín para los sacerdotes como un lugar para relajarse después de los estrictos períodos de Cuaresma. Las curas utilizadas en ese momento, como la sangría y varias curas de desintoxicación, requerían un fortalecimiento posterior. Los monjes se dividieron en dos grupos, uno continuó con la vida monástica normal mientras que al otro se le permitió descansar.
Las pinturas de Johann W. Bergl, alumno de Paul Troger y amigo de Franz Anton Maulbertsch, muestran una imaginativa actitud barroca ante la vida, pintando condiciones paradisíacas, en contraste con el ascetismo de la vida monástica. El tema de los frescos sobre las ventanas y puertas del gran salón del pabellón es el mundo de los sentidos. Los putti representan los cinco sentidos, por ejemplo, el sentido del gusto, el sentido más importante, se representa dos veces, como beber en el sur y comer en el norte.
El sol brilla en el centro del fresco del techo, la bóveda del cielo, y sobre él vemos un arco del zodíaco con los signos mensuales de las estaciones primavera, verano y otoño.
En los bordes del fresco del techo del desván pintado se representan los cuatro continentes conocidos en la época: Europa al norte, Asia al este, África al sur y América al oeste. Escenas exóticas se pueden ver en las otras salas, como el descubrimiento de América en la sala este. Las representaciones de ángeles jugando a las cartas o ángeles con tacos de billar indican que esta sala se utilizó como sala de juego.
Durante los meses de verano, la sala principal del pabellón del jardín en Melk Abbey se utiliza como escenario para conciertos en los Días Internacionales del Barroco en Pentecostés o los conciertos de verano en agosto.
Melk Abbey y su parque forman un todo armonioso a través de la interacción de los niveles espiritual y natural.